En el libro Soldado de la Vida. Leonard Cohen (ed. Celeste, 2002) de Alberto Manzano encuentro una categoría ctónica a tener muy en cuenta. Se trata de la temible e invencible mujer ctónica americana, definida por el propio Leonard Cohen. En un momento dado (una entrevista para El Europeo publicada en su número de primavera del año 1993), Manzano le pregunta algo muy jugoso: "¿Cuál crees que ha sido la razón del fracaso de la mayoría de maestros orientales que han llegado a Occidente para enseñar una espiritualidad supuestamente más rica que la nuestra?". Cohen responde:
"Oh, sí. Todos han naufragado en Occidente. No sé si todos, pero muchos, muchos. Los maestros zen acababan alcoholizados, o durmiendo con sus estudiantes, o con las esposas de sus estudiantes. Muchos maestros hindúes cayeron hechizados por las mujeres americanas y sus prácticas. La sexualidad americana es poderosa; las mujeres americanas son poderosas. Hay muy pocos maestros espirituales que hayan alcanzado el poder de una mujer americana. Son como niños en sus manos. Según la opinión popular, Estados Unidos es un niño, un país con poco que enseñar; y los maestros vienen de Oriente con la sabiduría, la antigua sabiduría. Pero todos naufragan en América. Ninguno puede sobrevivir a América. Todos tienen que arrodillarse y empezar a estudiar América. América es el gran experimento espiritual".
"Oh, sí. Todos han naufragado en Occidente. No sé si todos, pero muchos, muchos. Los maestros zen acababan alcoholizados, o durmiendo con sus estudiantes, o con las esposas de sus estudiantes. Muchos maestros hindúes cayeron hechizados por las mujeres americanas y sus prácticas. La sexualidad americana es poderosa; las mujeres americanas son poderosas. Hay muy pocos maestros espirituales que hayan alcanzado el poder de una mujer americana. Son como niños en sus manos. Según la opinión popular, Estados Unidos es un niño, un país con poco que enseñar; y los maestros vienen de Oriente con la sabiduría, la antigua sabiduría. Pero todos naufragan en América. Ninguno puede sobrevivir a América. Todos tienen que arrodillarse y empezar a estudiar América. América es el gran experimento espiritual".
5 comentarios:
Obviamente, su entrada me ha traído a la memoria esta canción:
http://www.youtube.com/watch?v=0tZ5cwm4jQc
en la que más o menos se les canta las cuarenta a las mujeres americanas (aunque claro, como siempre en estos casos, en realidad se trata "vete tú, puesto que yo no puedo irme").
Saludos.
jajajaja
a mi tmb me ha recordado a esa canción.
saludos
Algo tendrá América que todos la critiquen, siempre, y luego esos mismos no pueden vivir sin ella. ¿La clave del éxito de América puede estar en el desarrollo de cierta condición femenina?
Yo no he conocido íntimamente a ninguna mujer americana, pero en estos temas me fío de la palabra del tío Leonard. Seguro que son temibles (incluso en un mundo ya de por sí temible como es el ctónico).
saludos
Yo tampoco conozco a ninguna mujer americana, pero algunos que han estado allí me han dicho que en los locales nocturnos te entran con una soltura y facilidad dignas de cualquier macho alfa ibérico (vamos, que se comportan como por aquí cualquier chulo de discoteca, algo difícil de ver por estos lares).
Eso cuentan, sí. Recuerdo relatos de, por ejemplo, músicos o cantantes ingleses (Tricky es uno de los que más lo disfrutó) que abandonaban la Pérfida Albión camino de América, pensando que allí todo el mundo era muy mojigato y tal, cuando resultaba que en Estados Unidos follaron como nunca. Las americanas los devoraban.
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