
Améry sobrevivió a la destrucción más hecatómbica que han visto los siglos. Llevó sobre su cuerpo la herida, la huella que esa destrucción labró a fuego en su carne. Dio testimonio de su experiencia, no se escondió, ni tampoco olvidó, al contrario; su moral fue vigorosa y preñada de un resentimiento filtrado por la lógica y la dignidad. Aguantó en pie hasta 1978, cuando se suicidó con una sobredosis de barbitúricos en un hotel de Salzburgo. Unos años más tarde también se suicidó otro compañero en la 'universidad' de Auschwitz-Monowitz, el italiano Primo Levi. Dejo unas palabras lapidarias escritas por Améry, de las páginas finales de su tremendo y asfixiante, pero necesario, Más allá de la culpa:
"Sobre mi antebrazo izquierdo llevo tatuado mi número de Auschwitz; es de lectura más sucinta que el Pentateuco o el Talmud y, sin embargo, contiene una información más exhaustiva. También es más vinculante como cifra de la existencia judía.
No me angustia ni el ser ni la nada ni dios ni la ausencia de dios, sólo la sociedad: pues ella, y sólo ella, me ha infligido el desequilibrio existencial al que intento oponer un porte erguido. Ella y sólo ella me ha robado la confianza en el mundo".
No me angustia ni el ser ni la nada ni dios ni la ausencia de dios, sólo la sociedad: pues ella, y sólo ella, me ha infligido el desequilibrio existencial al que intento oponer un porte erguido. Ella y sólo ella me ha robado la confianza en el mundo".
4 comentarios:
Buen libro ése, Horrach. (Más allá de la culpa...). Últimamente estoy leyendo cosas sobre el judaísmo, cuyas consecuencias filosóficas me interesan. ¿Has leído a Jabès y a Rosenzweig? Un abrazo; que todo siga bien.
Estimado bloguero madrugador,
Te ofrezco la oportunidad de desengancharte de los barbitúricos y comenzar a llevar un ritmo de vida normalizado:
Mañana, sábado 5, a las 12 horas, nos visitará Jorge Carrión, quien expondrá su particular punto de vista sobre cultura y periferia en su conferencia-desayuno "El centro vacío: Una reflexión general sobre la relación entre centro y periferia en la literatura contemporánea, de Joyce a Roberto Bolaño, pasando por Celan, Naipaul, Borges, Coetzee, Peret y Nacho Vidal". Este acto clausura las jornadas En algún lugar de La Mancha. Aproximaciones a la periferia organizadas por Literanta y la Universitat de les Illes Balears.
Besos,
Hola de nuevo, David, com anam? A Jabès no lo he leído y tampoco sé quien es. Deme alguna pista, si es tan amable. A Rosenzweig, claro, sí lo conozco, pero sólo he ojeado textos suyos, ninguno completo. abrazos.
Marina, me sabe mal, pero mañana no podré venir a ver a Carrión. Tengo que hacer unas cosas en Sineu a esa hora, aunque esa relación que establece entre Celan y Nacho Vidal parece digna de descubrirse. Ya me contarás. besos
"Jabès" es Edmond Jabès. No he leído nada de él, pero el artículo en castellano que le dedica la Wikipedia me ha parecido tan sintético como ilustrativo y, además, muy pulcro en la redacción de la bibliografía (traducciones incluidas).
Saludos.
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