Estas últimas semanas TVE ha vuelto a programar (la última ocasión fue hace unos 3 años) Shoah, el documental que Claude Lanzmann rodó sobre el Holocausto. De nuevo en domingo, de madrugada, en cuatro pases de dos horas y media cada uno (la película alcanza las diez horas). Más de 20 años después de su estreno (1985) y sigue la magna obra de Lanzmann viviendo en la clandestinidad.
Poca gente ha visto Shoah entera, pero toda la filmación es indispensable, esencial. Se trata en su concepción de filmar el acontecimiento más espeluznante de la historia de manera seca y pegada a lo físico, a los testimonios de los supervivientes (también de algunos de los verdugos), a la filmación de los lugares de la masacre y al análisis de algunos investigadores del Holocausto. No aparece, por propia voluntad de Lanzmann, ni una sola imagen de archivo rodada durante el momento de la masacre. Todo se da en diferido, en una elipsis sobre el acontecimiento que abre posibilidades y que traslada a la mente del espectador el dibujo minucioso de lo que se llevó a cabo entre 1942 y 1945, la llamada Solución Final.
Como he dicho, todo en este film es esencial, pero me gustaría destacar la intervención de un tipo al que admiro desde hace tiempo: el historiador Raul Hilberg, judío americano de origen vienés, que fue una de las primeras personas que se dedicó a estudiar minuciosamente el Holocausto antes incluso de que la tragedia adquiriera este mismo término para darse a conocer, es decir, antes de que este tema se convirtiera en El Tema del siglo XX. Su obra más importante, a este respecto, es la colosal La destrucción de los judíos europeos (libro que en su última edición española, en Akal, consta de más de 1.000 páginas... y vale más de 100 euros). La primera vez que contemplé estas imágenes que dejo arriba me quedé fascinado: el obsesivo Hilberg explica al atento Lanzmann los entresijos de la máquina de matar nazi, punto por punto, detalle a detalle; progresivamente, a medida que desvela sus descubrimientos, el rostro de Hilberg se encoge en una mueca, triunfal, casi maléfica. El espíritu del conocimiento y el deseo frenético de verdad se abren paso en la opacidad casi impenetrable de la infernal maquinaria nazi adoptando para ello la perspectiva del verdugo, su particular sentido burocrático del crimen. Sólo así, desde una 'perspectiva nazi', se revela la clave, la prueba, y la mueca del sabueso se torna extática, pura, tras volver desde lo oscuro con el hueso ensangrentado entre sus apretados dientes.
[Existe en España un interesante libro sobre Shoah escrito por Carles Torner. Se titula Cavar con la mirada y fue editado por Gedisa en el año 2005.]
Poca gente ha visto Shoah entera, pero toda la filmación es indispensable, esencial. Se trata en su concepción de filmar el acontecimiento más espeluznante de la historia de manera seca y pegada a lo físico, a los testimonios de los supervivientes (también de algunos de los verdugos), a la filmación de los lugares de la masacre y al análisis de algunos investigadores del Holocausto. No aparece, por propia voluntad de Lanzmann, ni una sola imagen de archivo rodada durante el momento de la masacre. Todo se da en diferido, en una elipsis sobre el acontecimiento que abre posibilidades y que traslada a la mente del espectador el dibujo minucioso de lo que se llevó a cabo entre 1942 y 1945, la llamada Solución Final.
Como he dicho, todo en este film es esencial, pero me gustaría destacar la intervención de un tipo al que admiro desde hace tiempo: el historiador Raul Hilberg, judío americano de origen vienés, que fue una de las primeras personas que se dedicó a estudiar minuciosamente el Holocausto antes incluso de que la tragedia adquiriera este mismo término para darse a conocer, es decir, antes de que este tema se convirtiera en El Tema del siglo XX. Su obra más importante, a este respecto, es la colosal La destrucción de los judíos europeos (libro que en su última edición española, en Akal, consta de más de 1.000 páginas... y vale más de 100 euros). La primera vez que contemplé estas imágenes que dejo arriba me quedé fascinado: el obsesivo Hilberg explica al atento Lanzmann los entresijos de la máquina de matar nazi, punto por punto, detalle a detalle; progresivamente, a medida que desvela sus descubrimientos, el rostro de Hilberg se encoge en una mueca, triunfal, casi maléfica. El espíritu del conocimiento y el deseo frenético de verdad se abren paso en la opacidad casi impenetrable de la infernal maquinaria nazi adoptando para ello la perspectiva del verdugo, su particular sentido burocrático del crimen. Sólo así, desde una 'perspectiva nazi', se revela la clave, la prueba, y la mueca del sabueso se torna extática, pura, tras volver desde lo oscuro con el hueso ensangrentado entre sus apretados dientes.
[Existe en España un interesante libro sobre Shoah escrito por Carles Torner. Se titula Cavar con la mirada y fue editado por Gedisa en el año 2005.]
22 comentarios:
¡Vaya! No me entero de una. Esto me pasa por no hacer nada de caso a la tele. Luego aparecen cosas interesantes como esta y acabo llegando tarde y mal.
Gracias por la referencia. Estoy especialmente interesado en el mal y en la "destrucción" del ser humano, cosa que hubo a raudales durante el nazismo. Pinta bien lo que has puesto.
Saludos.
Hola Blues, bienvenido al subsuelo.
Bueno, yo tampoco ando muy pendiente de la televisión, pero como a veces ojeo en la prensa la programación pues me enteró de según qué cosas. De todas formas, la película, aunque no está editada en España, la tengo en dvd (francés). Cuando colaboraba en los ciclos de Ciensofá de Casatomada pensé en hacer un pase seguido de toda la película, 10 horas sin parar ni para ir a mear. Mi idea no prosperó, no gustó.
Pues si estás interesado en el mal y en la destrucción del hombre (también es seguramente mi tema favorito), y aunque esto suene a 'llevar el agua a mi molino', creo que René Girard es un autor indispensable en este sentido. No sé si lo has leído.
saludos
He pedido "El chivo expiatorio" y "La violencia y lo sagrado". Ya hace una temporada que los tenía en punto de mira.
A ver si no se demoran mucho con esto del verano.
Salud
Creo que vi un trozo por la tele, por casualidad, sin saber muy bien qué estaba mirando... Una parte en la que alguien que, si no voy mal, debía ser un antiguo carcelero o algo así, explicaba el funcionamiento de uno de los campos de concentración, mientras un curioso caballero le iba preguntando y él iba señalando en un mapa. Entremedias, se veían filmaciones de un campo -literalmente, un campo prácticamente desierto, aparte de la vegetación, y que supongo que debe ser el lugar donde estaba el otro campo, el de exterminio-. Todo como muy frío, muy distante. Y ponía la piel de gallina. De terror. Apagué la tele, lo reconozco. ¿Era "Shoá" aquello que vi?
Y adivina, amigo Horrach, quién le ha estado "comiendo la cabeza" a don Bluesman para que leyese algo de Girard... Dado el tema, la recomendación era obvia. ;)
De "don" nada :P .... ya sabes que yo soy más un desgraciado que otra cosa. ;) Bueno, y es verdad que la opinión de Rafael me ha servido también, pero cuando sacamos el tema ya había pedido uno de los libros de Girard. Parece que todos los rios convergen al mismo mar.
No sé por qué menciono tanto a este hombre si ni siquiera lo he leído aún. A este paso o me gustará o lo odiaré.... jeje
Saludos para ambos.
Girard no creo que se vaya a poner nunca de moda, pero lectores como el Rabino y Bluesman son los que se merece.
Rabino, por cierto, la escena que cita pertenece a una secuencia que fue rodada con cámara oculta, si no recuerdo mal. Lanzmann sonsaca a un carcelero nazi (creo que se hizo pasar por pronazi para que ése no sospechara) para que cuente cómo funcionaba un campo, no recuerdo si Treblinka o Belzec, y éste se gusta dando detalles. En el libro de Torner se dice que en esa o en otra escena con otro fulano del mismo pelaje acabaron descubriendo a Lanzmann y le tocaron un poco la cara.
shalom
Estimado Horrach:
Para los que sepan francés, la editorial Foliò ha sacado la edición en rústica de "La destrucción de los judíos en Europa" en 3 volúmenes por 30 euritos de ná. Se puede pedir en cualquier librería buena que tenga libros en francés (aunque así sale más caro) o en amazon.fr, fnac.fr, etc. Es algo más que una magna obra: es una catedral.
Yo he tenido el placer de ver Soah varias veces (me compré directamente el DVD) y hay dos momentos especialmente impactantes: la dura constatación del antisemitismo del pueblo polaco (con entrevistas deliciosamente malignas) y las declaraciones del peluquero (Lazar, creo) en Israel. Ahí acabo llorando más que en "Qué bello es vivir".
Saludos.
Almudena
Muchísimas gracias por su aportación, Walraute, se lo agradezco. Ahh, y bienvenido al subsuelo.
La verdad es que la diferencia es sangrante: 100 y pico en España y 30 eurillos en Francia. Hay muchos motivos para dimitir de español, pero éste es de los mejores. ¿Alguien sabe si resulta complicado sacarse la nacionalidad francesa?
Las entrevistas que cita, de Lanzmann (via intérprete) a varios campesinos polacos es buenísima, con un Lanzmann socarrón que deja con el culo al aire a los entrevistados. El momento del peluquero también es de los que no se olvida (Bomba creo que se llama, no sé qué Bomba): sus lágrimas, su silencio, y Lanzmann, obsesivo, diciéndole que no puede callar, que debe seguir explicando su historia por dolorosa que sea.
Más momentos: el del antiguo Sonderkommando (creo que judío checo) en Auschwitz que cuenta su labor allí, en los hornos (también llora el hombre), mientras la cámara va haciendo travellings alrededor de una de las chimeneas del campo. O ese en el que Lanzmann acude con su equipo a una cervecería creo que de Munich, para enfrentar a uno de los camareros con su pasado: fue un torturador en uno de los campos de la muerte. "Oberhauser, mire estas fotos" le suelta Lanzmann, mientras la cámara refleja la zozobra del criminal reciclado en don nadie.
saludos
La verdad es que soy una adicta a comprar libros en francés sobre el holocausto (el material es infinito). Lo más impresionante que he leído, junto con lo de Hildberg, es un librito precisamente escrito por un sonderkommando griego, Shlomo Venezia. El libro se llama "Sonderkommando. Dans l'enfer des chambres à gaz". Me hizo darme cuenta que estos hombres son los que más sufrieron durante aquel periodo y posteriormente. Muchos supervivientes masculinos de la Soah pertenecieron a los sonderkommandos. El librito está ilustrado con dibujos de David Olere, muchos de ellos hechos en Birhenau.
Si se va a google imágenes puede encontrar muestras de estos grabados.
Saludos.
Almudena
Hace tiempo que ando detrás del tema de los Sonderkommandos. El hecho de que sea el judío el que extermine al judío siempre me ha fascinado. El bueno pasa a ser malo, lo que habla de la gran capacidad de extensión que tiene el mal, y matando se transforma en el que lo oprime.
Tristemente apenas tengo conocimientos de francés. ¿No sabrás de algún otro libro recomendable sobre el tema?
Gracias y saludos.
Bienvenida al subsuelo, Almudena. Cierta persona ya me había comentado su interés por estos temas. Me apunto su recomendación, que parece apasionante. Ciertamente, los sonderkommandos son figuras fascinantes, por su faceta trágica, tremenda. Se debería hablar más de ellos.
Bueno, Bluesman, no diría yo que los Sonderkommandos se 'transformaran en los opresores' nazis, porque la mayoría, que yo sepa, se dedicaba a esas funciones por simple supervivencia. Además, su función no era matar judíos, sino de vaciar las cámaras de gas y llevar los dcadáveres a los crematorios.
Dejo esta entrada de Neguev sobre la cuestión:
http://neguevandme.blogspot.com/2008/06/sonderkommandos.html
saludos a ambos
Desde luego. A lo que me refería es que colaborando en el asesinato (en alguna medida) no queda definida la línea de quién está a un lado y a otro. Al ser "cómplice" la corrupción del asesino también se traslada.
Está interesante el enlace. Gracias y saludos.
No hay complicidad que valga.
Lo más terrible de los campos de exterminio es la animalización del prisionero: hay que sobrevivir. En ningún momento los sonderkommandos colaboraron con el "mal". Es mas: en muchos de ellos su única obsesión era sobrevivir para dar testimonio.
En relación con la animalización de los prisioneros es interesantísimo leer la novela de Primo Levi "Si esto es un hombre".
Almudena.
Tremendo el libro de Levi, Waltraute-Almudena (en un primer momento pensaba que se trataba de dos personas distintas), de esos que no se olvidan (aunque lo leí hace muchos años, debería hacer una relectura).
Siguiendo con los sonderkommandos, como se señalaba también usted antes, muchos supervivientes judíos de los campos de exterminio fueron sonderkommandos. En cuanto a 'colaboración con el mal' por parte de judíos, la labor de los Consejos Judíos fue mucho más remarcable que la de los sonderkommandos.
saludos
Saludos Horrach. Paseando me encuentro contigo. Leo sobre el holocausto y sobre Shoah... querría saber dónde puedo encontrar el documental entero. Lo he buscado pero sólo encuentro pequeños trozos.
Un placer pasar por aqui.
Saludos.
Lisola
Bienvenida al subsuelo, Lisola, y gracias por sus palabras.
Pues 'Shoah' no está editado en España, así que la única opción es comprar la edición francesa. Imagino que por internet se podrá encontrar algún sitio en el que se venda. A mí me lo consiguió una amiga que tenía una copia de esta edición francesa.
saludos
También hay una edición inglesa de la obra de Hillberg más asequible: la pueden encontrar en Amazon, de segunda mano, editado por Holmes & Maier, por unos 20,00 $. Efectivamente, es escandaloso el precio de Akal, pero no dimita de su faceta de español catalanoparlante, que falta nos hacen a los del centro que defendemos eso de la España variada y de múltiples culturas pero unida en los derechos y deberes individuales de sus ciudadanos. En fin.
Y lo de Shoa, que de viaje no me he enterado, y que no he llegado a ver el metraje completo nunca. Cierta nickjournalista que conozco se lo prestó a otro ex-gurú de esa página que no lo suelta ni a tiros, y yo a la espera.
Caramba, pues si la inglesa es todavía más barata, y dado que es el idioma original de la obra, intentaré conseguir ésta. Muchas gracias, Phil.
La copia de 'Shoah' me la consiguió precisamente una nickjournalista, Neguev; tal vez se trate de la misma en ambos casos.
saludos
En amazon.fr se puede comprar soah. Tiene subtítulos en castellano.
Algunas precisiones:
El peluquero se llama Abraham Bomba; el Sonderkommando, Filip Müller. La película no llega a las nueve horas y media. El libro de Hillberg está editado en bolsillo en varios países, incluidos Francia y Alemania. No así en España.
Muchas gracias por las precisiones, Satrústegui. Ahh, y bienvenido al subsuelo. saludos
tremendo. sólo sé que después de ver las 8 hs "Shoah" ya no volveré a ser el mismo.
Publicar un comentario